lunes, 26 de noviembre de 2012

STEP BY STEP

Los años pasan. La vida corre. Los días no se detienen. El tiempo está en un continuo ir y venir. Te das cuenta de quien importa, quien importó y quien nunca importará. Encuentras tu reflejo en otra persona, ese tú que tanto buscaste, que un día tuviste y que otro perdiste. Pero ese alguien que nunca ha dejado de caminar a tu lado. 

Yo que soy impulsiva e impaciente, no inconsciente. Soy precavida, pero no cobarde. Siempre luchadora, nunca belicosa. Soy honesta, sincera y directa, pero no cruel. Siempre preocupada por los que me importan, e incluso prestando atención a los que me dañan, pero no a esos que no aportan nada a mi vida ni a mi alma. Nunca me rindo, aunque en ocasiones pueda parecer inconstante. Soy dulce cuando quiero, pero ácida si me atacan. Ordenada en mi caos y sumamente peligrosa cuando me aburro. 

Yo que he luchado con todo lo que he tenido, he valorado cada día más las cosas, he visto una panorámica distinta de lo que realmente es la vida, lo que nos regala y por supuesto lo que nos quita. He aprendido de los errores y que rectificar es lo más preciado. Una simple palabra o un simple gesto (una pequeña cosa) pueden cambiarte la vida de principio a fin. Sé que no se debe dejar escapar aquello que es vital, aquello que te hace sonreír cada mañana y soñar cada noche. Nunca dejar de ser tú mismo e impulsarte por los sentimientos. He aprendido que es la vida, el día a día y como hay que luchar. 

Al otro lado tú, que nunca me has dejado. Difícil de definirte en un párrafo. Ese verdadero amigo que nunca defrauda, el confidente especial, la persona deseada. Eres todo corazón, bondad, elegancia, saber estar, alegría, dulzura, inquietud. Mi fiel reflejo, aunque nos cueste reconocerlo en ciertos momentos. Eres esa brisa que entra por mi ventana, ese rayo de luz que me alumbra al final del túnel. Tú, y solo tú, sabes lo que significas para mí. Esto solo te lo susurraré al oído, solo tú podrás disfrutar de ese placer. Tú, que con tan solo decirte "hola" ya sabes todo de mí, tú que me hablas con coherencia, madurez y sensatez. No fallas y siempre estás. Que me comprendes y me haces reír. Que siempre me recuerdas que la vida puede ser maravillosa. 

Y ahora que te echo de menos, confieso que nunca lo he dejado de hacer. Abrazaría tu cuerpo en vez de estar escribiendo esto. Te miraría embelesada deseando darte un beso y seguir besándote en la boca, en el cuello. Anhelando que susurres mi nombre, que mi cuerpo esté debajo del tuyo, oír tus suspiros, que nos barnicemos con ese placer que solo nosotros sabemos darnos. Ni siquiera sé si es tarde, a dónde llegaremos, dónde iremos a parar, pero sí sé que te voy a enseñar mis garras. Dispuesta a todo por ti. Luchadora e implacable. Optimista como una niña pequeña que acaba de ver el sol. Comprendiendo que eres la pieza del puzzle que me hace falta para estar completa. 

...Step by Step... 

No hay comentarios:

Publicar un comentario